miércoles, mayo 16, 2007

La uni......

Me sentí muerta de amor por primera vez a los 9 años, la paradoja es que el representante del género masculino al que hago alusión tiene como primer nombre uno de mujer y como segundo uno no muy "popular" por decirlo menos, pero esa falta de tino de sus padres en colocarle los nombres al hijo, nada tenia que ver con la carita de pícaro con que lo habían traído al mundo, en consecuencia lo que no tenia en los nombres lo tenia en pinta; obviamente jamas dije nada a nadie por esas épocas, acerca de mis alucinaciones con el niño, hubiera desentonado: era imposible que la chancona de la clase tuviera calentura alguna, habráse visto! no le quedaba tiempo para esos asuntos.
Ahora que en casi dos años he aprendido todo lo que no aprendí en casi tres décadas caigo en cuenta que al final uno termina siendo lo que el resto cree que eres, es decir terminas viéndote como la gente te ve y muy a menudo esa no es la imagen que nosotros tenemos de nosotros mismos.
A los 16, cuando finalizo mi etapa escolar aun no conocía lo que era sentir los labios de nadie junto a los mios, pero ya había escrito con las tripas muchas cartas esperanzadoras para parejas de adolescentes cercanos a mi como si hubiera devorado cientos de paladares con mi lengua, ahora me averguenza decirlo, antes era motivo de orgullo: cómo es posible entonces que al año siguiente conocería al "hombre de mi vida"?, sí sí a ese, con el que tenia que ser "contigo pan y cebolla", y "en las buenas y en las malas hasta que la muerte nos separe, en la salud y en la enfermedad...." es que todo es posible.
La idea que la familia Ingalls existe en la vida real ingresa en nuestras mentes desde muy chiquitas, aunque ya en la década de los 90s todos sabíamos que las chicas teníamos que estudiar una carrera, graduarnos ser profesionales, casarnos y ser felices por siempre jamas (esto podía suceder no necesariamente en ese orden ni con todos los ítems señalados pero la idea es esa, eso sí) , en mi caso siendo la menor de 5 hermanos, no podía, no debía desentonar (seria entonces la segunda desentonada no?) la tradición estaba ahí, nadie me sugirió -porque eso fue decisión mía y solamente mía- siquiera que es lo que tenia que estudiar ni donde, eso estaba casi sobre la mesa: iba ser ingeniera, graduarme y comprarle el auto a mi papá, total siempre había obtenido excelentes calificaciones en ciencias y en letras, es mas podía postular como exonerada al examen de admisión ordinario ya que tenia el segundo lugar de toda la promoción, el futuro de esta chica estaba resuelto, iría a la universidad donde ingresar nomas demoraba mínimo 2 años para los que su lema es "el que la sigue la consigue", ella lo consiguió, a pesar de que ese no era su lema, sin mucho esfuerzo además, cuando fue a ver los resultados pegados en la pared de la Puerta 1 le preguntó a su hermano mayor: en ingeniería sanitaria todos los cursos que se llevan son de puros números??, él le contesto: casi todos, ese "casi" fue la tabla de salvación de la que me así para ser feliz por haber ingresado a la uni.